
Berenjena, calabacín y tomate de Almería pierden mercado a pasos agigantados por los productos extranjeros
Según la interprofesional Hortyfruta, la situación del tomate es alarmante: apenas mantiene un 20% de presencia en Reino Unido frente a Marruecos o Turquía
La Organización Interprofesional de Frutas y Hortalizas de Andalucía (Hortyfruta) ha expresado su «preocupación» ante el «alarmante» desarrollo de la actual campaña y ha advertido de que las producciones de terceros países que «inundan» los mercados europeos en «desigualdad de condiciones», están lastrando la rentabilidad del sector y «poniendo en riesgo su continuidad».
De esta forma, la junta directiva de la Interprofesional se ha reunido este martes para estudiar el devenir de la campaña hortofrutícola tanto desde el punto de vista de las producciones, como del comercio intracomunitario de las frutas y hortalizas en los mercados europeos, y ha apuntado que «mira con recelo» a la campaña de primavera que está a punto de arrancar «y que puede verse comprometida de continuar esta laxitud administrativa».
Desigualdad de condiciones
En un comunicado, Hortyfruta ha trasladado que es consciente» de que, durante estos meses de campaña de invierno, el clima ha influido en las producciones con temperaturas primaverales, aunque ha destacado que el mayor hándicap al que se enfrentan agricultores y comercializadores es la competencia desleal a la que se ven sometidos por «producciones de terceros países sin control por parte de las administraciones».
Hortyfruya ha insistido en que la entrada de producciones procedentes de países terceros «en situación de desigualdad de condiciones, tanto en cuestiones medioambientales como socio-laborales», está provocando «una reducción de la cuota de mercado» para Andalucía en los principales productos.
Según el análisis realizado en la junta directiva, en el mes de febrero, «antiguamente dominado por el sureste español», la competencia procedente de países terceros «es ya muy fuerte».

Situación extrema para el tomate
Ha precisado que, en berenjena, a pesar de que Hortyfruta representa el 60% del comercio europeo, «se puede encontrar en los lineales de los supermercados producto con origen en Turquía».
La situación, según la Interprofesional, es «ya extrema» en el caso del tomate porque el porcentaje de producto andaluz en la UE y Reino Unido «no llega ni al 20 %, mientras que Marruecos de forma directa e indirecta casi alcanza el 40%, a lo que se debe unir otro 8% del tomate turco».
Respecto al calabacín, a pesar de que Hortyfruta posee una representatividad del 47%, Marruecos y Turquía «aceleran las ventas y ya suponen el 25% del mercado».
Las organizaciones miembros de Hortyfruta han apuntado que la única solución es que la administración «reaccione de una vez» y «controle de forma rigurosa las importaciones de terceros países a Europa como estipulan los acuerdos internacionales rubricados».
Han demandado, asimismo, que se realice «una mayor vigilancia desde el punto de vista fitosanitario» para evitar que se comercialicen en la UE «productos con residuos de plaguicidas por encima de los límites fijados».