Chicago llega a Sevilla este miércoles con una producción al más puro estilo Broadway con 26 actores, 14 músicos y más de 20 técnicos para interpretar una historia de violencia, explotación, amor y traición. El musical conserva la coreografía y la música original que, desde 1996, se ha representado en Broadway en más de 6.000 ocasiones y ganó 6 premios Tony. En el montaje que vendrá al Lope de Vega serán protagonistas Marta Ribera, María Blanco y Manuel Rodríguez. Ambientada en la extravagante decadencia de los años 20 norteamericanos, con la llamada «ley seca» en vigor y las mafias del alcohol asesinando a sus rivales para hacerse con el negocio, «Chicago» narra la historia de Roxie Hart, ama de casa y bailarina de un club nocturno que asesina con malicia a su amante cuando él amenaza con abandonarla. Tanto ella como Velma Kelly son dos mujeres ambiciosas encarceladas por crímenes «pasionales» (hoy serían violencia de género, aunque de género masculino) que luchan para conseguir los favores de Billy Flynn, un famoso abogado que utiliza la prensa para conseguir la libertad de sus clientes. Roxie, la protagonista, quiere hacerse famosa a toda costa y se encuentra en la cárcel, donde conoce a Velma, que le enseñará cómo desenvolverse entre rejas y salir en los periódicos.
La historia está basada en unos acontecimientos que escandalizaron a Illinois (Estados Unidos) en 1924, cuando el «Chicago Tribune» publicó la noticia de una cabaretera acusada de matar a su marido bajo el titular «Mujer toca aires de jazz mientras su víctima muere». El jazz empezó a desarrollarse y a difundirse por la radio, nuevo medio de comunicación de masas. Y esta música empieza a gozar de una creciente popularidad, aunque las personas de mayor edad se alarmaron ante las formas de baile «poco decorosas» que este nuevo ritmo traía consigo.
El musical -escrito por Fred Ebb y Bob Fosse- es el mismo que ha podido verse en Broadway, en el West End Londinense y en más de 30 países donde ha alcanzado más de 20.000 representaciones. Más de 17 millones de espectadores ya han visto este musical en una treintena de países.
La directora residente de la obra, Moira Chapman sostiene que el nivel de los artistas de la compañía española es igual al de los norteamericanos y que ahora «no hace falta ir a Broadway para verlo».
El director asociado Nigel West recuerda que este espectáculo fue llevado al teatro por primera vez en 1975, gracias al coreógrafo Bob Fosse, en colaboración con los compositores y letristas de «Cabaret» John Kander y Fred Ebb.
Sin embargo, en esa época, muy marcada por el escándalo «Watergate», «la gente no estaba muy orgullosa de ir al teatro y ver una producción que trataba sobre la corrupción», por lo que pasó prácticamente desapercibida.
En el año 1996, acabándose el siglo, el musical regresó a Broadway y, desde entonces, no ha parado de representarse. Para West, el público lo pasa bien con una obra que no es una comedia «pero que tiene momentos satíricos y unas coreografías muy peculiares y únicas, con unos artistas vestidos de forma muy minimalista y sexy».
La gerundense Marta Ribera, Velma, aparece como una especie de maestra de ceremonias que al principio engancha al público con un carácter muy fuerte, un punto de arrogancia, pero que también tiene aspectos divertidos.
La barcelonesa María Blanco interpreta a Roxie, un ama de casa cuyo mayor sueño «es aparecer en la prensa, pero un arrebato pasional la lleva a cometer un crimen y acaba en la cárcel, donde conocerá a Velma y aprenderá muchas cosas con ella».
El reparto se completa con Fedor de Pablos, Linda Mirabal Jean-Claude, J.Giró, Vanesa Bravo, Adan Aguilar, Jacques Vidal, Pascual Orti, Paco Abarca, Skizzo, José Antonio Torres, Sílvia Álvarez, Teresa Belza, Sarah Schielke, Viviana Camino, Chema Zamora, Ela Ruiz y Víctor González.
Nigel West considera que la docena de temas musicales de la obra contribuyen a alargar las escenas y, a diferencia de lo que ocurre en otras obras, «aquí la historia narrativa, de dos horas y media de duración, la desarrollan cada una de estas canciones».
Ganadora de seis premios Tony, esta producción de Stage Entertainment se ha visto, asimismo, beneficiada por la película que realizó en 2002 Rob Marshall, interpretada en sus papeles protagonistas por Renée Zellweger y Catherine Zeta-Jones, según ha reconocido West.
En este espectáculo han participado desde su estreno en 1996 actores y cantantes como el desaparecido Patrick Swayze, Brooke Shields, Utte Lemper, Mathew Settle, Melanie Griffith o Catherine Zeta-Jones.
