Un apretón de manos con un par de sonrisas han bastado para que Ángel Torres, presidente del Getafe, y su entrenador, José Miguel González, Míchel, firmaran la paz después de un intercambio de declaraciones sobre Adrián González, el hijo del técnico madrileño y ex jugador del equipo "azulón". El ambiente estaba enrarecido en el club después de unas palabras de Míchel en la revista «Soccer is life». Por enésima vez, y casi como en cada entrevista que concede, el ex jugador del Real Madrid tuvo que responder a una pregunta sobre su hijo. Míchel tuvo la suerte o la mala suerte de haber coincidido con él en el mismo equipo toda la temporada pasada y los cinco últimos partidos de la anterior.
Para el presente curso, su vástago ya no estará en el club porque el presidente decidió no contar con él. Cuestionado al respecto, Míchel, supuestamente (ha desmentido sus palabras al presidente), fue claro: "¿Qué si se ha sido justo con él? No me paro a pensar en eso. Él quiere ser futbolista pero tendrá que serlo en otro sitio, no en Getafe. Ángel Torres y yo ni siquiera hemos hablado del tema. Ha sido una decisión del presidente que no siguiera con contrato en vigor. Yo no puedo entrar a valorar, sólo respetar su decisión. Adrián fue despedido por ser mi hijo, eso está claro", afirmó el entrenador madrileño.
Ese párrafo desencadenó que los medios de comunicación, habitualmente pendientes del Getafe sólo en momentos cumbre de cada temporada, giraran la cabeza hacia el club del sur de Madrid para hacerse eco de una historia que colea por la entidad madrileña desde hace ya dos años.
Un día después, Ángel Torres mandó un mensaje a su entrenador desde el diario «Marca»: "No viene a cuento contestar 45 días después de que supiese que su hijo no iba a seguir en el equipo. Soy una persona que dice las cosas a la cara. Cuando supe los jugadores que no iban a continuar se lo comuniqué directamente al director deportivo y al entrenador. No contesto a ningún familiar porque les tengo el máximo respeto. Entiendo que defienda a su hijo, pero el fútbol es así", dijo.
Ahora las aguas revueltas han vuelto a su cauce. La presentación de la camiseta que lucirá el Getafe por Europa ha servido como excusa para juntar a los dos protagonistas. En el acto ante los medios, Torres desveló que Míchel habló con él sin pedírselo. En esa conversación, el entrenador negó haber dicho en la entrevista lo que salió publicado sobre su hijo. Torres le ha creído, restó importancia al asunto y ambos firmaron la paz en público.
