Una niña se fotografía con el soldadito de plomo que la recibe a la entrada. En una amplia sala con billares y bolera, unos abuelos compiten con un nieto preadolescente. La sobriedad del blanco de la sala de café, muy londinense aunque la empresa tenga su origen en Argentina, contrasta con las luces del salón contiguo. El paraíso de los niños es un amplio corredor lleno de atracciones. Colores y sonidos que recuerdan a Las Vegas en versión miniatura. Ganchos con los que los más habilidosos ganan chuches. Juegos de destreza para los más pequeños. Simuladores en los que los padres están más motivados que sus hijos. Tiovivos tradicionales sacados de cuentos. Juegos didácticos y diversión asegurada. La decoración, además, es exquisita, desde unas características tartas en la cafetería hasta una colección de peluches junto a la biblioteca.
Un saloncito con sillas de colores de pequeño formato componen la biblioteca infantil, para que, entre juego y juego, los niños puedan detenerse a leer alguno de los cuentos expuestos. A tan sólo unos metros, entre bolas del mundo, los libros para adultos, que también tienen derecho a leer.
Hecho a medida
El pasado julio abrió en el centro comercial «Heron City», en Las Rozas este nuevo local dedicado al ocio infantil que recibe el nombre de Neverland. Un espacio destinado a las familias en el que, aunque el protagonista indudable sea el niño, todos sus integrantes pueden pasar un rato agradable.
Más de 1.700 metros cuadrados en el que todo está medido al milímetro, desde el papel de las paredes hasta los sofás situados estratégicamente para no perder de vista a los más traviesos. La excelencia nace de una larga tradición dedicada al ocio infantil por parte de la empresa. Aunque éste es su segundo centro en España –el primero está en el Centro comercial Islazul, en Carabanchel–, regenta cerca de 20 locales en Argentina.
Celebraciones, cursos y talleres
La empresa ofrece también la posibilidad de celebrar cumpleaños u otros eventos infantiles, sin descartar la opción de promever actividades en cooperación con los colegios para el próximo curso, o talleres, encuentros y competiciones en fechas señaladas. Además, prevé continuar su proceso de expansión a medio plazo con dos locales más en la Comunidad de Madrid y con aperturas en distintas regiones del país.
En cuanto a modalidades de precio, las atracciones pueden pagarse individualmente en cada jugada o adquirir billetes por medio de la tarjeta fidelidad. Con ésta, además de disfrutar de descuentos, el niño podrá sumar y acumular puntos por cada partida vencida, que después podrá canjear por juguetes, desde una pulsera a diez puntos hasta un peluche de Piolín por 250 puntos.
