Oviedo no revivirá la imagen que el 11 de julio provocó que las lágrimas brotarán de los ojos de miles de aficionados españoles, cuando jugadores y cuerpo técnico de la selección de fútbol levantaban en Johannesburgo la copa que le acreditaba como campeona del mundo. Un éxito que, sólo dos años después de conquistar la Eurocopa, resultó el impulso final para que el jurado otorgará por unanimidad el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes de 2010 al combinado nacional, galardón que será entregado el próximo viernes en el Teatro Campoamor.
A pesar de ser los grandes protagonistas del hito logrado en Sudáfrica, no todos los jugadores podrán recibir el merecido aplauso de la capital asturiana porque Mourinho y Guardiola así lo han decidido. En la fotografía que se guardará en el álbum histórico de este Premio habrá significativas ausencias porque ninguno de los internacionales del Real Madrid ni del Barcelona presentes en la cita mundialista —trece futbolistas— podrán viajar hasta Oviedo por la negativa expresa de sus entrenadores. Conocidos son los encontronazos entre Mourinho y Guardiola, pero en esta cuestión han respondido como un solo hombre y su coincidencia en la prohibición es total. «Su ausencia es innegociable», llegó a aseverar ayer el portugués.
Partido un día después
En el discurso para justificar la negativa, el calendario de Liga aparece como único y gran argumento. El día siguiente a la entrega del galardón hay tres puntos en juego —el Madrid se enfrenta en el Bernabéu al Racing y el Barça visita Zaragoza— y no quieren distracciones para sus plantillas antes de afrontar esos compromisos. Pese a reconocer la importancia del premio, el entrenador del Barcelona —que siempre viaja el mismo día de partido, salvo en compromisos europeos— apeló a una norma interna del club azulgrana que prohíbe a sus jugadores acudir a actos publicitarios o a recoger galardones 24 horas antes de un encuentro.
Asunto zanjado para ambos técnicos. No acudirán Casillas, Ramos, Albiol, Arbeloa ni Xabi Alonso, por parte blanca, así como Valdés, Puyol, Piqué, Busquets, Iniesta, Xavi, Pedro ni Villa, por la azulgrana. Pero mientras Mourinho y Guardiola impiden la presencia de sus jugadores, el Villarreal ha programado un viaje «exprés» para sus campeones del mundo y tanto Capdevilla como Marchena estarán en Oviedo el próximo viernes 22, a pesar de que jugarán la noche anterior en El Madrigal el compromiso de Liga Europa. A diferencia de madridistas y barcelonistas, ese fin de semana el equipo castellonense tiene programado para el domingo su partido de Liga. Tampoco está descartada la presencia de Reina y Fernando Torres, para los que el Liverpool está estudiando dar permiso.
