La familia de Enrique Morente presentó «hace varios días» una denuncia judicial por una presunta negligencia médica cometida en la clínica La Luz de Madrid, donde el fallecido cantaor permanecía ingresado desde la semana pasada, según fuentes familiares citadas por Efe. Los parientes del artista explican que guardaron silencio por el «miedo lógico» al estar todavía Morente ingresado en el centro médico, según las mismas fuentes. La policía se personó entonces en la clínica, donde tomó datos y pidió informes, poniéndose en marcha una serie de medidas cautelares.
«Fue una salida lógica a tanta cautela y desinformación por parte de la clínica», según las mismas fuentes, que han subrayado que estuvieron siete días sin tener noticias por escrito del estado de Morente. El centro médico asegura en un comunicado que por respeto a la «intimidad de la familia y al secreto profesional entre facultativos y paciente», no pudieron «informar públicamente en ningún momento de la evolución del cantaor», según el texto.
La clínica explica que tras la operación a la que Morente fue sometido el pasado día 6 «el enfermo experimentó un notable empeoramiento de su estado, por lo que el Dr. Moreno le reintervino de urgencia». Morente había ingresado en el centro médico el 2 de diciembre «para ser intervenido» de una úlcera. La operación se realizó, según la nota del centro, «el 4 de diciembre a las 20.00 horas por el doctor Moreno y su equipo», tras lo que el paciente «fue trasladado a la UVI para su control postoperatorio».
La familia, «indignada»
El cadáver del cantaor será sometido este martes a una autopsia y posteriormente, a partir de las tres de la tarde, será velado en la sede de la Sociedad General de Autores de España (SGAE). Tras haber permanecido unas horas en la Clínica la Luz, donde se produjo el fallecimiento, los restos mortales de Morente han sido trasladados esta noche al Instituto Anatómico Forense de Madrid. La familia baraja la posibilidad de que el cortejo fúnebre se traslade el miércoles a Granada, donde tendrá lugar el sepelio.
«Era un hombre muy joven [...] con el tiempo se sabrá lo que ha pasado y lo que ha fallado», ha dicho nada más salir de la clínica el periodista José María García, que ha indicado que «la familia está absolutamente indignada; no saben lo que ha pasado».
Las fuentes familiares citadas por Efe aseguran que la segunda operación a que fue sometido Morente no fue comunicada a la familia hasta cuatro horas después, pues volvió a entrar al quirófano a las tres de la madrugada y no se pusieron en contacto con su esposa, Aurora Carbonell, hasta las siete de la mañana.






