El portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), César Cabo, aseguró ayer en Noche 10, el programa que dirige y presenta Ángel Expósito, que la reacción del Gobierno ha sido desmesurada al decretar el estado de alarma. A su juicio no se puede echar toda la culpa a los controladores, ya que AENA incumplió muchos puntos de la negociación. «Lo que pedimos no es un tema salarial porque la rebaja fue en febrero y la explosión en diciembre. Queremos normalidad laboral». Afirmó que lo que pretende la USCA es que se forme a la plantilla y que la ajusten para estar en la media europea.
Respecto al proceso de negociación, que comenzó el pasado lunes, se ha ido con una actitud más ágil en relación con otras ocasiones.
El portavoz de la USCA sí quiso matizar a modo de disculpa que la reacción del día 3, «fue desmesurada», ya que la gente estaba en un grado de agitación total, y aseguró que esta situación no tiene por qué repetirse. Sin embargo, incidió en el hecho de lo que hicieron no justifica en modo alguno la reacción del Gobierno con el estado de alarma. «Lo que pasaba es que las negociaciones no avanzaban, daba la sensación de que estaban mareando la perdiz y que estaba usando este tema políticamente cuando debería haberse solucionado en verano». Añadió además que la situación del 3 de diciembre «estuvo a punto de ocurrir un mes y medio antes en España y Canarias. En el archipiélago pretendían que hubiese controladores trabajando sin cursos de formación».
Cabo quiso dejar claro que no fue cierto que todos los trabajadores se pusieran enfermos a la vez, lo que hicieron fue acogerse a la ley de Seguridad Aérea. «Cuando todavía quedaban compañeros trabajando en las torres de control, AENA decidió cerrar el espacio aéreo. Habrá que investigar todo lo que ocurrió ese día», dijo.
También desmintió que ese día los aviones no se quedaron volando y dando vueltas: «Nosotros cumplimos con nuestro trabajo y aterrizaron con la seguridad garantizada, no como lo ha dicho el ministro de Fomento en repetidas ocasiones».
Actualmente, la situación —según el portavoz de los controladores— es de «normalidad en las torres de control y en la navegación», pero dijo sentirse discriminado con «escuchas telefónicas y con una jurisdicción militar».
Expedientes
Respecto al tema de los expedientes, «no se si este tema saldrá encima de la mesa, imagino que el sindicato ayudará a cada empleado. Son 420 los expedientes abiertos y hay que valorar cada expediente».
En cuanto a quién va a pagar las indemnizaciones, el portavoz de la USCA afirmó que AENA es responsable civil subsidiaria de los controladores pero lo decidirán los tribunales.








