Nueva Rumasa acumula una deuda de 7,5 millones de euros con 520 ganaderos de vacuno, que llevan sin cobrar entre tres y cinco meses, lo que supone una media de más de 20.000 euros por explotación, según datos de la organización agraria COAG. Cerca de la mitad de los productores afectados por el impago de leche se encuentran en Galicia y el resto se reparten, principalmente, entre Castilla-la Mancha (comarca de Talavera de la Reina), Aragón, Castilla y León (Avila y Segovia) y Menorca. A ellos se suman además otros 200 productores de caprino, que igualmente se han visto afectados por el impago de materia prima por parte de Nueva Rumasa, que compra unos 200 millones de litros de leche al año, a través de Clesa, Cacaolat y Dhul, mediante intermediarios que son los que tienen que afrontar el pago a los ganaderos. En concreto, gran parte de los ganaderos han dejado de servir leche desde el pasado 1 de enero ante la incapacidad de la compañía de hacer frente a los pagarés y se han puesto a buscar rutas de recogida alternativas.
Nueva Rumasa compra unos 200 millones de litros de leche al año
En concreto, proveedores de Clesa han empezado a adoptar medidas jurídicas ante el impago de materia prima que sirven a esta empresa y además han dejado de servir leche desde el pasado 1 de enero ante la incapacidad de la compañía de hacer frente a los pagarés. «Están haciendo dinero con el dinero que les deben a los proveedores», resaltaron las mismas fuentes, al tiempo que señalaron que si los ganaderos dejan de suministrar leche a la fábrica, empezará a llegar menos producto a los lineales y con menos regularidad.







