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Zapatero se verá forzado a intensificar los compromisos presupuestarios
Día 13/03/2011 - 02.50h
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El debate sobre la autonomía financiera de las comunidades españolas ha dado un giro este fin de semana. El «Pacto por el Euro», firmado en Bruselas por los líderes de la Eurozona, incluye un apartado en el que establece que se fijará por ley (constitucional o ley marco, entre otros) la disciplina presupuestaria, «tanto a nivel nacional como subnacional».
Este aspecto es fundamental en el caso de España, donde los ejecutivos autonómicos son responsables de un porcentaje muy elevado del gasto total de las administraciones. De ahí, que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se apuntara rápidamente a la sugerencia al anunciar que «el Gobierno adoptará nuevas reformas para cumplir con el pacto de competitividad consensuado por los países de la zona euro, lo que incluirá fortalecer los compromisos de cumplimiento estricto del déficit».
La idea, aunque ahora se encuentra en Bruselas a propuesta de Alemania y de la Comisión Europea, no es nueva, ya que el
propio Zapatero hace unos meses aseguró que no descartaba poner coto por ley al déficit público, tal y como va a suceder en el caso de las cuentas públicas estatales, que contarán con unos topes delimitados por ley, tal y como sucede en Alemania.
Al margen de la siempre delicada cuestión de la financiación autonómica, Zapatero explicó en la madrugada de ayer, al término de la reunión extraordinaria, que España ya ha puesto en marcha muchas de las medidas que incluye el Pacto por el Euro, pero que «habrá algunas más que se concretarán en la cumbre de los días 24 y 25 de marzo tras consultarlas con el resto de partidos políticos».
Tanto Zapatero como el resto de jefes de Estado de Eurozona tendrán que acudir a la próxima cumbre de Bruselas con los deberes hechos, ya que se han comprometido a traer un plan de acción cuantificable, medible y verificable que pondrán en funcionamiento el próximo año.
Polémica por los salarios
Otro de los puntos polémicos del nuevo catálogo de medidas de ajuste será la reforma de la negociación salarial. Como quedó de relieve con la carta remitida por Zapatero al presidente del Consejo de la UE, Van Rompuy, el Gobierno parece decidido a modificarla, vinculando las retribuciones a la productividad. A este respecto, el secretario general de CC.OO., Fernández Toxo, incidió en que la fórmula para fijar los sueldos en España «es libre» y que, de establecerse por ley, «podría ser recurrida en cualquier momento».
