Helicópteros de las Fuerzas Armadas de Japón rocían con agua los reactores nucleares de la central de Fukushima, en un intento por enfriarlo y evitar así que se produzca una fusión parcial de su núcleo, con la que se liberarían más partículas radiactivas a la atmósfera.
La Policía de Tokio prepara camiones con cañones de agua para refrigerar la planta. Por su parte, la Compañía Eléctrica de Tokio (TEPCO), encargada de la gestión de la central, contempla reactivar temporalmente el suministro para bombear agua hacia las instalaciones nucleares. Una fuente de la entidad ha señalado que es «muy probable» que se lleve a cabo este plan.










