El primer ministro ruso, Vladimir Putin, consideró ayer «completamente aceptable» la candidatura de la ministra de Finanzas francesa, Christine Lagarde, para dirigir el Fondo Monetario Internacional (FMI) y sustituir a Strauss-Kahn. «La decisión debe tomarse en otro lugar y a otro nivel, pero la candidatura de Lagarde me parece muy seria», declaró Putin a los periodistas.
Este comentario es interpretado en Europa como el visto bueno de Rusia a la candidatura de Lagarde, después de que la idea de que fuese el presidente del Banco Central de Kazajistán, Grigory Marchenko, el sustituto de Strauss-Kanh, apoyada por el país y algunos estados de la Commonwealth, no haya fructificado finalmente, informa Reuters.
La candidatura de Lagarde, aunque ha sido criticada por Brasil, India, China y Sudáfrica, cuenta con el respaldo de varios países europeos como Francia, Gran Bretaña, Alemania y Noruega, así como de, por ejemplo, del presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso; el comisariao europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn; y la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton.
Lagarde tendría que ganarse el puesto frente al presidente del Banco Central de México, Agustín Carstens, si finalmente confirma su candidatura a la dirección del FMI. Carstens contaría con el apoyo de la mayoría de los países del centro y sur de América.







