El incombustible Jason Statham, una de las figuras más destacadas del cine de acción actual, protagoniza esta película del director Elliott Lester, que supone la adaptación cinematográfica de la primera entrega de una saga literaria escrita por Ken Bruen.
En el filme, Statham da vida al sargento detective Brant, un homófobo declarado que tendrá que colaborar con el agente homosexual Nash (Paddy Considine) para dar caza a un asesino en serie que está matando policías, creando gran revuelo en la prensa de Londres, ciudad donde se desarrolla la cinta.