Son buenos, bonitos y todavía baratos. El triunfo de la selección española sub 21 en la Eurocopa de su categoría ha puesto a sus jugadores en la picota del fútbol internacional. Neymar y Agüero acotaron hasta ahora un mercado que ahora extiende sus intereses ante la calidad soberbia de Thiago, la eficacia de David de Gea, la regularidad de Mata, la chispa de Adrián López, el rendimiento de Javi Martínez y la personalidad de Botía.
De Gea ya deshojó la margarita hace cuatro meses, en febrero. El 1 de julio, una vez acabada la temporada oficial 2010-11, anunciará su fichaje por el Manchester United, que abonará al Atlético los 25 millones que cuesta su cláusula de rescisión.
En el mismo mes que David negociaba su adiós del Calderón, el conjunto rojiblanco acordaba con el deportivista Adrián su fichaje de futuro a partir del 1 de julio, una vez finalizado su contrato con el equipo gallego. Pero Augusto César Lendoiro adujo una prerrogativa del contrato con el delantero que le permitía renovarle unilateralmente por una temporada más. El litigio lo resolverá un árbitro del caso, un Catedrático de Derecho Laboral, ajeno al fútbol, que ha sido nombrado por la Liga Profesional y que debe ser refrendado por la AFE. La razón de esta doble confirmación es que la patronal defiende al Deportivo y el sindicato, al futbolista.
El valencianista Mata espera que la oferta del Barcelona por 20 millones se haga realidad en las próximas horas. El Valencia necesita dinero y la cifra es óptima para ambas partes. Solo falta hacer efectivo el acuerdo económico.
Botía y Mata, 20 millones
Quien está en la cresta de la ola es el mejor defensa del Europeo sub 21: Botía. El conjunto azulgrana no quiso ejercer su derecho de recompra por 1,8 millones, con un plazo que acabó el 15 de junio, y el central del Sporting cuesta ahora lo mismo que Mata: 20 millones. Al Barcelona le queda otra ocasión de recuperarlo: si Alberto no es traspasado en los próximos diez meses, el club catalán podrá ficharlo entre el 15 de mayo y el 15 de junio de 2012 por 2,5 millones.
La joya de la corona que tiene mil novias es «el nuevo Xavi»: Thiago Alcántara. De casta (Mazinho, campeón del mundo en 1994) le viene al galgo. La pretensión de Guardiola de contratar a Cesc ha supuesto un duro golpe para el joven, que esperaba ascender al primer equipo del campeón de Europa y hacerse un hueco progresivamente en la plaza de Xavi, que vivió esa misma situación cuando tomó el testigo del propio Pep a partir de la campaña 98-99. La negociación con Fábregas ha supuesto que hasta el Madrid se interese por el jugador. El Chelsea y el Manchester United le pretenden. El precio mínimo sería de 18 millones. El Barcelona se encuentra en una diatriba, porque el futbolista no quiere quedarse.
