En Vídeo
En imágenes
Noticias relacionadas
Ni Xavi Hernández ni Sergio Ramos. Ninguno de los dos viajará hoy con la selección hasta Bari, donde el combinado nacional se enfrentará a Italia en el primer partido amistoso de la temporada para la campeona del mundo. Los médicos de la federación confirmaron la lesión del madridista, al que sustituirá Monreal, al tiempo que desvelaron unas dolencias en el sóleo del centrocampista azulgrana, que no forzará para poder estar listo el domingo en el partido de ida de la Supercopa.
A Del Bosque le gusta huir de los problemas. Suele utilizar el sentido común para no crear males innecesarios y se apoya en su mano izquierda para solucionar los que inevitablemente se le vienen encima. El final del curso pasado puso a prueba esa capacidad del salmantino como «mediador de conflictos». Los roces creados a raíz de los duelos entre Real Madrid y Barcelona incendiaron el vestuario de la selección hasta que el técnico entró en acción para suavizar la situación. Tres meses después, sin que haya siquiera comenzado de manera oficial la temporada, el seleccionador se ve de nuevo en medio de la rivalidad de ambos clubes. Con la Supercopa a la vuelta de la esquina, el amistoso entre España e Italia se ha erigido en un nuevo motivo de conflicto entre ambos clubes. Desde Barcelona acusan a Mourinho de fingir con la lesión de Sergio Ramos, mientras que en Madrid, la ausencia de Xavi en la lista final se ve como una forma de compensar a Guardiola por la baja del madridista. Con los dos fuera de la lista, Del Bosque reparte alegrías y enfados, aunque es el barcelonista el que respira aliviado, al saber que podrá contar con su cerebro titular para visitar el Bernabéu.
«Soy del Madrid y el Barça»
En un intento por aliviar tensiones, el técnico salmantino reconoció ayer que, a pesar de su pasado madridista, ahora mismo tiene el corazón dividido. «Soy del Real Madrid y del Barça a muerte. He estado 36 años en el Madrid pero ahora soy de los dos. Es imposible convencer a todos», reconoció, al tiempo que exigió compromiso al grupo más allá de las rivalidades deportivas. «Me parece imposible que Iniesta se lleve mal con Xabi Alonso o Íker con Xavi. Cada uno defiende lo suyo de la mejor manera, pero en la selección, sin unión, es imposible que lleguen los resultados. Las buenas relaciones existen y estoy seguro de que van a seguir por el buen camino», espetó el seleccionador.
Del Bosque tuvo palabras de cariño para Pep Guardiola, al que puso como modelo de entrenador por su trabajo con la cantera —del que se beneficia la selección—, y también para Íker Casillas. «Es el mejor portero que nunca he visto», reconoció repartiendo elogios en su papel de «mediador de guardia».
