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Que la selección haya sellado matemáticamente su billete para la Eurocopa de 2012 no significa que todo el camino esté andado. Queda decidir quiénes deben viajar a Polonia y Ucrania. Por eso aparecen las probaturas, una rueda en la que ayer entró el lateral del Valencia Jordi Alba.
El lateral catalán, habitual en los planteamientos de Unai Emery, es la principal novedad de la lista de Vicente del Bosque para los últimos dos partidos de la fase de clasificación, en los que la selección española se enfrentará a Escocia (7 de octubre) y República Checa (10 de octubre).
Alba oposita a cubrir el puesto en el flanco izquierdo de la defensa que parece haber dejado huérfano Joan Capdevila. El ahora jugador del Benfica no juega en su nuevo equipo y ha perdido el sitio en las últimas convocatorias. No es ningún secreto que se busca sangre nueva para la línea de zagueros. «Se ha adaptado a la posición de lateral izquierdo y lo veremos más de cerca. Vamos a ir dando los pasos para ir equivocándonos lo menos posible», explicó Del Bosque.
Se exploran nuevas opciones para prevenir malas noticias, como la que ha tenido a Puyol apartado de la Roja durante casi un año. Reeditará su sociedad con Piqué, siempre que el fuerte golpe que recibió en la Liga de Campeones no le impida vestirse de corto.
De corto quiere vestirse David Silva más a menudo, y así lo hizo saber públicamente. Del Bosque tuvo que apagar el ligero conato de incendio tirando de la misma lógica con la que suele moverse: el centro del campo de la selección es así de exigente. «Su séquito a veces le perjudica», remató el técnico, que recordó que otras estrellas del balón, como Cazorla o Cesc, lidian la misma situación. Incluso Roberto Soldado, que se quedó fuera pese a ser uno de los arietes más en forma del torneo.
El próximo miércoles dará comienzo la concentración y en cinco días quedará cerrada esta primera fase. Los amistosos, sin embargo, harán más largo el camino a la Eurocopa.
