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La Policía Nacional le detiene tras cinco años huido de la justicia. Se le acusa de ser uno de los cabecillas de la mayor trama de blanqueo de capitales del narcotráfico en Galicia
Día 26/10/2011 - 13.53h
El pasado mes de junio comenzó el juicio para depurar responsabilidades sobre los 36 acusados de formar parte de una de las mayores tramas dedicadas al blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico y desarticulada en Galicia hace siete años. La «Operación Cormorán» llegaba a los tribunales con la ausencia de sus principales cabecillas: José Antonio Pouso Rivas, conocido como «Pelopincho», y el abogado Manuel Franco Argibay. Sobre este último pesaba una orden de busca y captura internacional después de que se diera a la fuga hace cinco años para evitar enfrentarse a varios procesos judiciales. Se creía que podía esconderse en Brasil, pero la Policía Nacional consiguió dar con su paradero, en Madrid, y detenerlo el pasado viernes.
Detenido en Kinépolis
Desde la comisaría de Moncloa-Aravaca se estableció un servicio de vigilancia durante tres días a las puertas de su residencia, ubicada en la calle Goloso. El viernes, a mediodía, los agentes observaron cómo Franco Argibay se introducía en un vehículo. Los policías le dieron el alto, pero el prófugo se metió en el coche rápidamente y pisó el acelerador para escaparse de las Fuerzas del Orden. Comenzaba así una persecución de 15 kilómetros que tuvo su fin a las puertas de los cines Kinépolis diez minutos más tarde, según informó un portavoz de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.
En prisión, sin fianza
Franco Argibay trató de zafarse de los agentes por las calles de la Ciudad de la Imagen. Cuando varios efectivos consiguieron acorralarle, el fugitivo salió del coche y echó a correr. De poco le sirvió la carrera, ya que fue interceptado por los policías en segundos, detenido y trasladado a la comisaría. En estos momentos se encuentra en la prisión de Soto del Real, recluido sin fianza por riesgo de fuga, a la espera del mandamiento judicial.
