Cuando era un niño, allí en Rosario, un médico le dijo a su madre que el pibe necesitaba hacer deporte, porque le sobraban nervios. «Pelo pincho» es el nervio del Real Madrid. Todo corazón. Un buen futbolista que se ha hecho grande gracias a la confianza de Mourinho. Hace un mes escuchaba críticas. «Di María no es el de antes, ya no corre como la temporada pasada». Nadie pensaba que la Copa América pasa factura. Comenzó esta campaña más tarde. Ha tardado en recuperar esa forma que rompe a las defensas. Su entrenador estaba tranquilo. Sabía que volvería a ser el de antaño. El argentino ya solucionó la batalla de Zagreb con un bonito gol que significó tres puntos. Y en octubre ha explotado. El Real Madrid ha vuelto a ser letal cuando el «Fideo» ha volado por la banda.
«Pelo pincho», ovacionado
Anoche marcó un gol, le hicieron un penalti no señalado y dio una asistencia preciosa a Benzema, que abrió el marcador gracias a su pase medido. Ya es el asistente del campeonato español, con seis pases de la muerte. Mejor que Messi.
Lo mejor para este muchacho es que Higuaín, Benzema y Ronaldo anhelan sus centros al hueco con la fe de quienes saben que el balón irá al sitio perfecto para fusilar al guardameta. Tanto en la Copa de Europa como en la Liga se ha convertido en un hombre clave para abrir las retaguardias. Sus regates y sus penetraciones desequilibran. Las zagas pierden la posición frente a él. Y los delanteros marcan a placer. Muchas dianas que se suman a la buchaca de Gonzalo, de Karim y de Cristiano llevan media factura de Di María.
El mejor equipo de la Liga
Reaparece Benzema y marca. Higuaín jugó en Málaga y también firmó el 0-1 de la goleada anterior. Todos rinden. Di María les alimentó a los dos de balones fundamentales. Mourinho cambió al argentino para que le aplaudiera ese público que dudaba semanas atrás. Le ovacionó.
Karanka tomó la palabra en lugar del portugués y explicó el secreto de este Real Madrid: «Presionamos e intentamos robar el balón más arriba, en campo contrario. Lo podemos hacer gracias al sensacional estado físico de todos los jugadores».
Di María profundizó en esa estrategia. «Presionando así las cosas van mejor. Estamos apretando en todos los partidos para marcar rápido y manejar las situaciones. La clave es que ahora sabemos tener mejor el balón».
Benzema ofreció la mejor definición de este rendimiento. «Ahora mismo somos el equipo más fuerte de la Liga». El Madrid ha marcado 31 goles en nueve jornadas, con un promedio de 3,4 por encuentro. Persigue el récord de la quinta del Buitre, los 107 goles anotados en la campaña 89-90.
Garrido, técnico del Villarreal, subrayó esos récords del enemigo. No teme por su futuro. Roig, su presidente, subrayó que no piensa echarle.





