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Vuelve Carlos Ruiz Zafón, el rey Midas del best-seller made in Spain, y con el vuelven también esos libros que no son solo libros, sino fenómenos editoriales de cifras mareantes e impacto prácticamente universal. Vuelve Ruiz Zafón, sí, y lo hace con "El prisionero del cielo" (Planeta), tercera entrega de esa tetralogía ambientada en una Barcelona neblinosa y embrujada por el Cementerio de los Libros Olvidados y motivo más que suficiente para movilizar a libreros y a casi todos los periodistas culturales de Barcelona y alrededores junto al gótico pasado por agua de la Capella dels Àngels y, la ocasión manda, atravesarles la pechera con una chapa rematada por uno de esos dragones por los que, dicen, se pirra el escritor barcelonés.
Y así, con el dragón como emblema y con un despliegue de medios más propio de la premiere de una superproducción de Hollywood que de la presentación de un libro, Zafón ha vuelto a subirse al escenario -"esto sí que es una estrella auténtica", le ha espetado la periodista Gemma Nierga, presentadora del acto- para dar el pistoletazo de salida a lo que, ahora sí, ya es el fenómeno editorial de 2011.
Un fenómeno que, obviando la parte más literaria del asunto, se resume en un un millón de ejemplares que, a partir de mañana, abarrotarán mostradores y librerías en busca de otro millón de lectores que, tal y como ha explicado el propio Ruiz Zafón, encontrarán aquí pistas suficientes como para deshacer cualquier entuerto provocado por "El juego del ángel", el segundo libro de la saga. "Hasta ahora no sabíamos muy bien de qué iba la partida, pero ahora las piezas ya empiezan a encajar. Ahora entendemos qué estaba ocurriendo y se empieza a hacer más visible el diseño de toda la historia", ha subrayado el escritor barcelonés, instalado sobre una tarima que reproducía, entre volúmenes polvorientas y estanterías en posiciones imposibles, el célebre Cementerio de los Libros Olvidados.
Así, justo cuando se cumple una década de la sonada aparición de "La sombra del viento", Zafón se aleja discretamente del gótico sombrío de "El juego del ángel" para firmar una novela "mucho más luminosa" en la que reaparecen, amén del Cementerio, personajes como Daniel Sampere y Fermín Romero de Torres.
La parte «más dinámica» de la serie
Será por eso que la editorial se ha animado a pergeñar un eslogan que remite directamente a la "La sombra del viento" -"te emocionarás como la primera vez", podía leerse- y se insiste en señalar que ahora entramos en la parte más dinámica y veloz de la serie. "La historia ya ha salido del túnel y ahora todo se ha acelerado y el libro es más rápido y dinámico", apunta Zafón, quien señala que en la próxima entrega, la última, acabaremos llegando "a la esencia de todos los personajes". "Lo sabremos todo, incluso quien es el padre de Daniel", ha avanzado el autor. Para eso, sin embargo, habrá que esperar otros dos o tres años.
Una nimiedad comparado con lo que, según el autor, habrá que esperar para ver la serie convertida en película ya que su intención no es otra que la de mantener sus libros alejados del celuloide por siempre jamás. "La mejor película es la que el lector ve en el teatro de su mente, así que lo correcto con estos libros es dejarlos como estar", ha asegurado.
