Los seguidores de la Ponferradina quieren que su equipo venza hoy al campeón de Copa, "por 1-0 y en el último minuto, con la condición de que el Madrid remonte en el Bernabéu y vuelva a ganar la final al Barcelona". Es el resultado de la eliminatoria al que se apuntan la generalidad de los aficionados locales. La verdad: son tan madridistas como su presidente, que es socio merengue y dirige la Sociedad Deportiva con mucho acierto.
Los forofos de la Ponferradina están dolidos por la derrota del Madrid ante el Barcelona. Hoy han rodeado el estadio de El Toralín desde las diez de la mañana, para vivir un ambiente que quizá no vuelva a repetirse en lustros. "Vienen dos Balones de Oro, como Cristiano y Kaká, y van a jugar. ¡Qué más podemos desear!", comentan.
Cristiano ha sido la atracción de la ciudad desde que el equipo madrileño llegó a Ponferrada a las ocho de la tarde de ayer. Fue el futbolista más requerido por los incondicionales de ambos equipos, que son los mismos, porque son de uno y de otro. Esta noche no sufrirán. El portugués firmó autógrafos y se hizo fotos con todas las personas que se lo pidieron.
Silbado el sábado por sus goles errados ante el conjunto azulgrana, CR7 ha solicitado a Mourinho jugar hoy. Anhela reencontrarse con el gol y olvidar lo sucedido el sábado. No es un castigo del entrenador que tenga que disputar este partido, como algunos dicen, por no haber rendido ante el Barcelona. Quien conoce al club y a Cristiano sabe que el delantero siempre quiere saltar al campo. Son los técnicos los que quieren darle descanso y él se niega muchas veces. Hoy no se han negado, porque psicológicamente le viene bien marcar algún tanto.
