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Castañas / Agrónoma
Campaña de otoño

Los turistas, la «gran amenaza» del castañar de Huelva

Los empresarios recuerdan que cada año se incautan miles de kilos de fruto a ladrones, organizados o de paso, que crean un grave perjuicio al sector

15 octubre 2020, 09:20

Coincidiendo con el arranque de la temporada de recolección de castañas en el Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, la Asociación de Empresarios, Comerciantes y Autónomos de Galaroza ha lanzado una campaña para la sensibilizar a la ciudadanía acerca de la importancia que tiene el castañar para municipios como Galaroza, Fuenteheridos, Castaño del Robledo, Cortegana o Los Marines, según explica un comunicado de la entidad.

Con esta iniciativa, para la que se van a diseñar una serie de imágenes definidoras de varios aspectos del cultivo acompañadas de textos explicativos que lleguen a vecinos y visitantes, los empresarios cachoneros «pretenden proteger el comercio de numerosos pueblos de la zona, que venden castañas y otros frutos de otoño, y los ingresos de los cosecheros, que a veces no cubren los gastos que precisa la explotación de las fincas».

Al mismo tiempo, se quiere disuadir a aquellos turistas que paran en la carretera, se adentran en las fincas y llegan a producir destrozos en alambradas o en el propio arbolado. «Lo que en apariencia puede ser visto como una simple recogida de castañas de forma recreativa por parte de miles de turistas, se ve agravada por los excesos y, sobre todo, por la actuación de cuadrillas que roban las castañas en el interior de las fincas», indican los empresarios.

La campaña se va a divulgar a través de redes sociales, grupos de Whatsapp y medios de comunicación, extendiéndose a la provincia de Huelva y otras limítrofes, de donde procede parte del público potencial al que va dirigida. En su difusión van a participar entidades de apoyo a los trabajadores autónomos a las que pertenece la Asociación de Empresarios de Galaroza, tales como la Unión de Autónomos UATAE, FACOAN, Autmas o AESTA Turismo.

Numerosas sustracciones

En cuanto a las pérdidas económicas, los castañicultores calculan que los robos, bien organizados o bien llevados a cabo por visitantes del espacio natural, pueden llegar a cifrarse en 100.000 kilos según la temporada, un 10 por ciento de la producción anual en los castañares del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche. «La Guardia Civil incauta cada año miles de kilos de fruto a ladrones que crean un grave perjuicio al sector», aseguran los empresarios.

Una campaña complicada

Sobre la recogida de castaña que acaba de comenzar, la asociación empresarial de Galaroza ha señalado que «parecía ilusionante por la buena polinización y la abundancia de erizos en los árboles, pero la falta de lluvias y el efecto pernicioso de las plagas podría dar al traste con estas expectativas». «Si no llueve pronto, el calor secará el interior de los erizos y la calidad del fruto se verá gravemente afectada», aseveran.

En la Sierra de Aracena se contabilizan unas 3.500 hectáreas de castañares, de los cuales el 80% son centenarios y el 75% están certificados como ecológicos. Destacan variedades como Pelona del Barranco de los Nogales y San Migueleña, como extratemprana, y Ancha de Álajar, Helechal, Comisaria y Diego Vázquez, como tardías. La mitad de esta superficie se encuentra actualmente en estado de abandono o semiabandono.

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