
El sector de la fresa de Huelva necesita 6.000 trabajadores más para sacar adelante la campaña
Desde el sector reclaman que se aumente el contingente de trabajadores contratados en origen hasta 10.000: solo se han autorizado 3.800
La propuesta para el próximo contingente GECCO (Trabajadores extranjeros para trabajar en campañas agrícolas) es de 3.800 personas, que se unirán a los repetidores de años anteriores, una cifra que, desde UPA Andalucía, consideran «insuficiente».
«Esto no cubrirá la demanda de mano de obra», aseguran desde la organización agraria. Por ello, han reclamado al Gobierno que «sea sensible a sus peticiones» y permita cubrir las necesidades de mano de obra para tener una buena campaña de recolección.
El secretario general de UPA Andalucía, Jesús Cózar, ha asegurado que los productores le han trasladado «la escasez de trabajadores que tienen» y que «amenaza su competitividad porque la campaña se basa en la migración circular; es decir, se contratan en su país de origen y, una vez que concluye la recolección, regresan a sus hogares».
Así va la campaña
Por su parte, el secretario general de UPA Huelva, Manuel Piedra, ha explicado que «estamos ahora mismo al 50% de la plantación de las fresas», de forma que «cada día se ponen en la provincia nueve millones de plantas, que vienen de Ávila y Segovia, y llegaremos a un total de 350 millones de plantas», lo que «crea 10.000 puestos de trabajo en este mes, más los indirectos en Castilla y León».

«Además de los 20.000 jornaleros que repetirán de otros años, los agricultores habíamos solicitado 10.000 trabajadores nuevos más. Pero solo nos han concedido 3.800 nuevos jornaleros entre países sudamericanos y Marruecos. Este año no vendrán colombianos ni ecuatorianos y la experiencia piloto en Paraguay va a ser para cien personas, algo que no es de recibo», ha expuesto.
Hacen falta temporeros y técnicos
UPA Andalucía ha destacado que «el campo andaluz ya ha dejado de ser un sector de mano de obra sobrante» y que «ahora faltan temporeros, técnicos y profesionales especializados».
«Huelva, por ejemplo, emplea en cada campaña de frutos rojos unas 110.000 personas, de las que solo el 14% son inmigrantes, contratados en sus países, con derecho a alojamiento y billete pagado; el resto son temporeros comunitarios, que empalman la campaña de frutos rojos onubense con la de hueso en Lérida, por lo que muchos se marchan a partir de mayo, o nacionales, que dejan el campo a partir de finales de marzo para ir a trabajar a la campaña turística y la hostelería», señala.
Piedra también se ha referido al «segundo problema» que tienen los productores, «el de las infraestructuras hídricas», y ha insistido en la necesidad de que la Junta de Andalucía y el Gobierno ratifiquen el acuerdo para la construcción de la presa de Alcolea.