El delantero Zlatan Ibrahimovic ya no es jugador del FC Barcelona, tras haber firmado esta noche un contrato de cuatro años con el conjunto italiano AC Milan.
El club italiano asumirá este año los 12 millones de euros de ficha del sueco, aunque el año que viene el delantero se rebajará el sueldo un millón de euros. Pero aún hay más. Ibrahimovic jugará esta temporada en el Milan en calidad de cedido, aunque a partir de la temporada que viene el club italiano deberá efectuar de forma obligada una opción de compra por valor de 24 millones de euros, por la que Ibrahimovic será traspasado definitivamente al equipo «rossonero».
El ya ex jugador azulgrana viajará mañana a Milán para pasar el reconocimiento médico.
El presidente del Barcelona, Sandro Rosell, el vicepresidente del Milan, Adriano Galliani, el representante de Zlatan Ibrahimovic, Mino Raiola, y el propio jugador se habían reunido durante más de cinco horas esta tarde en las oficinas del Camp Nou para decidir el futuro del delantero, con intención de ultimar el más que previsible adiós del jugador al equipo azulgrana.
«Guardiola ha roto mi sueño»
Tras la reunión, el delantero «rossonero» ha declarado a los medios que este «es el final que ha querido Guardiola». «Cuando entro en una habitación en la que está Guardiola, él sale fuera. No sé si es que me tiene miedo», ha señalado; y ha añadido con mayor dureza: «Guardiola es el filósofo que ha roto mi sueño de estar en Barcelona», «me ha quitado la ilusión y ahora quiero recuperarla en otro equipo», ha dicho el jugador.
Una vez alcanzado el acuerdo, se pone fin así a la breve estancia de un año del sueco en el club catalán. Se acaba además el que ya era el «culebrón» del verano, conocidas las discrepancias y las tensiones del jugador con el técnico del Barcelona, Pep Guardiola.






