Empolvarse la nariz está visto como una de las excusas más recurrentes de las mujeres para ir al baño y escaparse de una conversación aburrida o una situación incómoda.
Pero cuando Uma Thurman dice que va a retocarse parece más bien que va a meterse en una pelea de harina a lo «Kill Bill».
Lo cierto es que a la actriz se le fue la mano con la brocha de maquillaje en la 40 gala anual de la «Prensa Feminista» en Nueva York.
La musa de Trantino se presentó a este acto con unas manchas blancas debajo de los ojos, en la nariz y cerca de las orejas debido a que no se llegó a extender bien el maquillaje.
Pero no es la primera vez que una cosa así le ocurre a una actriz. A Nicole Kidman, una veterana de la alfombra roja, las prisas le jugaron una mala pasada y se presentó con la cara blanca en la premiere de «Nine».
La Reina Isabel II de Inglaterra es una asidua a ponerse un fondo de tinta muy claro y polvos en abundancia.