Desde que negocia su futuro, ha jugado peor. Nervioso. Tenso. El propio Real Madrid lo reconoce. Es un gran central al que las ofertas del Chelsea, del Manchester United, del Manchester City y del Barcelona le hacen pensar más en su porvenir que en su equipo. Képler Laveran Lima Ferreira, Pepe, finaliza contrato en 2012 y su petición de renovación hizo saltar todas las cajas del Bernabéu: seis millones anuales netos. El portugués opina que merece entrar en el grupo de los futbolistas mejor pagados del club y los cantos de sirena procedentes del Chelsea y del Manchester City le permiten apostar fuerte. Los dos conjuntos ingleses le ofrecen contratos que rondan esos seis millones. El Barcelona también participa en la puja, en la búsqueda del sustituto de Puyol. Su oferta es inferior a las británicas y en Madrid se piensa preferentemente que quiere encarecer el precio del central. Después de varios meses de oferta y demanda, la casa blanca se planta con una cantidad definitiva: 4,5 millones netos por cuatro años. Pepe tiene ahora la palabra.
Los responsables de la entidad argumentan que esa cifra es justa. Es la misma ficha que cobra un campeón del mundo, Xabi Alonso. La que otro campeón del mundo, Sergio Ramos, que finaliza contrato en 2013, firmará en breve en un nuevo acuerdo que se extenderá hasta 2017.
El Real Madrid no se moverá de una valoración que considera ideal para los grandes jugadores que demuestran su categoría en el césped. Espera que el luso de origen brasileño reflexione y acepte esta propuesta. Considera que Pepe se equivoca al tensar tanto la cuerda con una petición económica excesiva.
Albiol y un central del filial
Los dirigentes tienen clara su política de actuación si el jugador no continúa: «Contamos con Albiol y apoyaremos a los centrales de la cantera». La trayectoria de «Pepinho» no es un libro blanco para solicitar ahora una ficha que supere a la de Casillas (5,6 millones). Sus dos últimas campañas no fueron las deseadas ni para el equipo ni para el defensa.
Su agresión a Casquero el 21 de abril de 2009, con una alevosa patada sobre el rival tendido en el césped, le dejó marcado. El Comité de Competición le castigó con diez partidos, que le impidieron jugar durante los dos primeros meses de la Liga 2009-10. Reapareció en octubre de 2009 y el 12 de diciembre de ese año sufrió una grave lesión en la rodilla derecha. La rotura del ligamento cruzado confirmó los temores: seis meses de baja. No volvió a competir con su equipo durante toda la temporada. El central forzó la máquina para afrontar el Mundial. Reapareció para el fútbol el 8 de junio, en el encuentro amistoso entre Portugal y Mozambique. Y disputó la Copa del Mundo. Pero no pisó la hierba del Bernabéu hasta el mes de septiembre de la temporada actual.
Sin problemas internos
Mourinho le pide que renueve. Le advierte: en el Real Madrid tendrá un mejor futuro que en cualquier otro sitio. El entrenador quiere solucionar los litigios de los contratos para que sus hombres estén centrados en la competición. Pepe rinde menos desde que aborda este asunto. Sergio Ramos se lo quita de encima al aceptar esos 4,5 millones por temporada. El técnico niega que haya mal ambiente en el seno de la plantilla. Rechaza el supuesto enfrentamiento entre Cristiano y Casillas: «Son noticias no verdaderas que no hacen mucho daño». Mourinho desea repetir en el Real Madrid el éxtasis conseguido en el Inter. «Con el Inter lo gané todo este año. Ha sido el mejor de mi carrera. Por eso la nota que me pongo esta temporada, de uno a diez, es un once».
