El Gobierno luso anunció hoy un nuevo paquete de medidas de ajuste para reducir su déficit un al 4,6% en 2011 y al 3,7% entre 2012 y 2013, que incluye penalizar las pensiones superiores a 1.500 euros con un «impuesto especial».
Portugal decidió así atender a la petición de diversas voces dentro de la Unión Europea -entre ellas la de la canciller alemana, Angela Merkel- para que fuera más allá en sus reformas económicas, que entraron en vigor este año.
El nuevo paquete de medidas fue anunciado este viernes en Lisboa por el ministro de Finanzas luso, Fernando Teixeira dos Santos, justo cuando empieza la cumbre extraordinaria de la eurozona en Bruselas, con la gestión de la crisis de la deuda soberana en los países periféricos -entre ellos Portugal- como principal asunto a debatir.
Bruselas se felicita
El comisario de Asuntos Económicos, Olli, Rehn, ha elogiado este viernes las nuevas medidas de ajuste anunciadas por Portugal y se ha mostrado convencido de que le permitirán «recuperar el control sobre la dinámica de la deuda y poner fin a la incertidumbre». Rehn ha dicho que el plan portugués despeja el camino para avanzar en el resto de pilares de la respuesta global de la eurozona a la crisis de deuda, en particular «reforzar y aumentar la flexibilidad» del fondo de rescate.







