El Banco de España advierte en su último Informe de Estabilidad Financiera de que no prevé una recuperación «significativa» del crédito al sector pirvado en los próximos meses. Y eso que el organismo si ha constatado que las tasas interanuales negativas registradas por el flujo de la financiación «han sido menos intensas en los últimos tiempos que en los periodos precedentes». Sin embargo, el organismo considera que la debilidad de la economía española y el nivel actual de endeudamiento del sector privado —«tras su aumento en los años de expansión económica», recuerda— no permiten todavía a bancos y cajas de ahorros reabrir el grifo del crédito.
El nivel de deuda no permite todavía a bancos y cajas dar créditos
El propio regulador renoce ahora en su documento que «la ratio de endeudamiento de los hogares y las sociedades se redujo muy lentamente a lo largo del segundo semestre de 2010, por lo que se mantiene en niveles elevados». La ratio de dudosos del crédito al sector privado residente en España se situó en el 5,9% en diciembre de 2010. Además, su tendencia, según el BdE, es alcista. Y esa es una de las causas principales de la sequía crediticia.
«Castigo» a las empresas del ladrillo
Según las cifras que maneja el organismo dirigido por Miguel Ángel Fernández Ordóñez, la financiación al sector privado está al mismo nivel que al cierre de 2009. Esto es, está estancada. El crédito al sector privado residente en España cayó un 0,8%; los datos más recientes, correspondientes al mes de febrero, muestran incluso un empeoramiento de esta magnitud, que cae un 1%.
Aun así, el Banco de España reconoce que existen diferencias «significativas» según el destino del crédito. Por ejemplo, el regulador constata que la financiación a las empresas presenta una evolución «marcadamente diferente» entre las dedicadas a los sectores de la construcción y la promoción inmobiliaria y el resto. Y en el caso de los hogares, el crédito destinado a la adquisición de una vivienda creció un 1% interanual, mientras los préstamos para otros fines cayeron un 5,5%. Mientras tanto, la financiación a las administraciones públicas sigue al alza: a cierre de 2010 presentaba una variación del 10%.







