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Jesse James había pasado bastante desapercibido en Hollywood a pesar de estar casado con la ganadora de un Oscar, Sandra Bullock. No obstante, cuando se le pilló «in fraganti» siendo infiel a la actriz, medio mundo puso cara (y conoció sus intimidades) a este empresario.
Mientras Bullock intentaba reponerse tras la ruptura, James comenzó una relación con Kat Von D, una tatuadora estadounidense, y la pareja se comprometió en enero. La historia no termina con final feliz, ya que Jesse y Kat han roto su relación y cada uno continúa cno su vida por su lado.
Así lo ha confirmado la tatuadora en su página personal de Twitter, mientras que el motero ha señalado, en unas declaraciones exclusivas a People: "Estoy muy triste porque realmente la quería". "La distancia entre los dos ha sido demasiado", añadía resaltando el motivo de la ruptura.
James, de 42 años, y Kat, de 29, se comprometieron en enero y durante todo este tiempo han estado planeando una boda estival en torno al aniversario de su noviazgo.
Pero, al parecer, la distancia entre Los Ángeles, donde Von D graba su reality, y la casa de James a las afueras de Austin, en Texas, donde actualmente reside con sus hijos Chandler, Jesse Jr. y Sunny, ha sido demasiado y ha podido con su relación.
"No estamos juntos pero por respeto a él, a su familia y a mí, esta es toda la información que voy a compartir", escribió la tatuadora en su Twitter.
A principios de año, el empresario anunció su compromiso con Kat, una noticia que sorprendió a todo el mundo ya que tan solo habían transcurrido siete meses desde su divorcio con Sandra Bullock. Él aseguró que a pesar de todas las críticas recibidas por haber sido infiel a su ex mujer, 2010 ha sido el mejor año de su vida pues se enamoró de una mujer increíble, gentil y cariñosa. Además, añadía que envejecer junto a la tatuadora iba a ser maravilloso. Algo que hoy por hoy, ya no podrá cumplir.