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Jorge Lorenzo temió por su dedo anular tras el accidente del pasado domingo en el Gran Premio de Australia. «Después de la caída estaba muy preocupado por si lo perdía, pero con el excelente trato que he recibido, seguro que recuperaré totalmente la sensibilidad en los nervios y en los tendones. Tengo muchas ganas de volver a subirme a mi M1», confiesa el piloto.
El de Yamaha fue operado ese mismo día en Melbourne para salvar los nervios y tendones del dedo de su mano izquierda dañados en la caída. Pese a que la intervención fue un éxito, necesitará en principio un periodo de recuperación largo, informa su escudería.
El deportista balear regresa este martes a Barcelona y sabrá si puede correr en la última cita del año, el Gran Premio de la Comunidad Valenciana, dentro de dos semanas.
Al campeón de 2010 le habría gustado «batallar por el título hasta el final, a ser posible hasta Valencia». «Pero la caída del domingo lo impidió», lamenta. Por ello, prefiere «pensar ya en la próxima temporada y trabajar duro para volver a ganar».
Lorenzo felicita, en declaraciones recogidas por Ep, a Casey Stoner (Honda), que le ha relevado como campeón del mundo. En opinión del mallorquín, Stoner ha protagonizado «una temporada increíble, con muy pocos errores».
