Ayer estaba en Alemania. Hoy ya descansa en su casa de Brindisi, donde puede ver tranquilamente los vídeos que le han guardado con la última entrevista de su exmujer, Romina Power, en «Sálvame de Luxe». El programa fue un exito de audiencia y de ahí el eco que ha tenido en toda la parrilla de Telecinco volviendo a la carga sobre el tema de Ylenia y ahora con el añadido de las explosivas declaraciones de Romina, quien confesó ante Jorge Javier (seguramente en la mejor entrevista que le he visto) que durante sus años de casada con el cantante italiano había recibido «alguna patada y bofetadas». Romina no entró al detalle, lo soltó sin más y sacó a la luz los maltratos físicos que hasta la fecha nunca había contado y mira que la han entrevistado. Tras sus palabras, el tema de Ylenia se quedó en segundo plano. Romina habló del fuerte carácter de Albano, de cómo su hija le tenía miedo, de lo mal que se llevaban, de las discusiones que mantuvieron... Insistió en que la joven está viva y secuestrada por la mafia italiana y habló de los videntes a los que ha recurrido en estos años y que son los que le insisten en que la chica no ha muerto (!!).
Ayer fue Albano quien me aseguró por teléfono que no había podido ver el programa pero sí hablado con todos los amigos que le contaron lo que Romina había soltado, titulares que ya han tenido su repercusión en Italia. Albano niega la mayor cuando le pregunto por malos tratos con patadas y bofetadas a su exmujer y responde en tono irónico que «si amar demasiado es maltratar, pues entonces sí la he maltratado». El artista asegura que no entiende nada («esto es el triunfo del absurdo») y que «no creo que Romina fuera masoquista y estuviera treinta años con un hombre que le daba patadas». Me insiste en que hablará más cuando vea el vídeo, pero que tiene como testigos a sus hijos para que digan la verdad y que no reconoce a su exmujer. «Creo que la que esta hablando es otra Romina». Por su voz noto que está tranquilo. De momento.










