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Dejó escapar uno ante el Sao Paulo vistiendo la camiseta azulgrana en 1992, aunque el gol de Pedro en la final de 2009 ante el Estudiantes de La Plata argentino le permitió sacarse la espina dando ya órdenes desde el banquillo. La historia del Barcelona en el Mundial de Clubes viaja unida a la trayectoria de Guardiola, que hoy comienza su tercer desafío con la semifinal ante el Al Saad (11.30, Cuatro). «Es el título del año que más ilusiona por el hecho de poder jugarlo. Llegar aquí es muy complicado», explicó el técnico, más preocupado por la adaptación de su plantilla al nuevo horario que por las dificultades que pueda ofrecer el rival qatarí. Después de varios días de aclimatación en Japón, «aún hay jugadores que se levantan a las tres y media de la madrugada y no pueden volver a conciliar el sueño», explicó horas antes del partido que le puede abrir las puertas a la final. Allí espera el Santos, después de superar ayer al Kashiwa Reysol (3-1) con un golazo del deseado Neymar.
Los miles de kilómetros de distancia no han cambiado la prudencia y la mesura en el discurso de Guardiola, que sin embargo sorprendió con una contundencia poco habitual en sus respuestas al preguntarle sobre el futuro de David Villa en el Barcelona. Una información publicada en España en la que se anunciaba que el delantero internacional podría abandonar el club en el mercado de invierno fue desmentida con semblante muy serio por el técnico barcelonista, con una de las afirmaciones más directas que se le recuerdan en los últimos años: «Mienten».
El asturiano no atraviesa su mejor momento en el Barcelona y, aunque hoy apunta a titular, el clásico puso de manifiesto que Alexis le ha robado protagonismo. El técnico salió al paso y, aunque reconoció que no había hablado con Villa después de su suplencia en el Bernabéu, asegura que cuenta con la mayoría de sus jugadores para la próxima temporada.La posible alineación para hoy será la formada por Valdés; Alves, Puyol, Piqué, Abidal; Xavi, Iniesta, Busquets; Villa, Pedro y Messi.
En la final del domingo espera el Santos. En la agenda del Barça y del Real Madrid, Neymar no desaprovechó la oportunidad de reivindicarse y anotó uno de los goles en la victoria ante el Kashiwa japonés. «La presión es un placer», manifestó feliz el delantero brasileño tras ganar la semifinal.
