Cada anuncio de la relación de jugadores seleccionados por Vicente del Bosque pasaba casi inadvertido porque lista tras lista se repetían los mismos nombres. Bien correspondían al bloque de la fase de clasificación o al bloque del Mundial. Pocas caras nuevas. Siempre a cuentagotas, pese a la controversia que se suscitó con motivo del amistoso ante México en pleno mes de agosto.

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Vicente Del Bosque
Ahora, Del Bosque se ha visto en la obligación de sacar la carpeta del cajón para buscar recambios. Ocho mundialistas no aparecen en la relación del primer equipo, entre lesiones y el apoyo a la selección sub 21 en su pelea por sacar un billete para los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Albiol, Cesc y Xavi estaban descartados de antemano por lesión, así como Mata y Javi Martínez, que ahora están echando una mano a la sub 21. A las cinco bajas se unieron Pedrito, Jesús Navas y Fernando Torres, también por lesión, durante el fin de semana.
Un once previsible
Un escenario que deja a la selección con lo justo. Con lo puesto para afrontar los encuentros de clasificación ante Lituania (Salamanca, día 8) y Escocia (Glasgow, día 12). Es la realidad y hay muy pocas dudas en la elaboración del once que podría presentar en ambos partidos porque la relación, aunque es competitiva, se ha desequilibrado bastante en favor de los que vienen siendo titulares habitualmente.
Por este motivo, el equipo que se enfrente a Lituania el próximo viernes no diferirá mucho del siguiente: Íker Casillas, Sergio Ramos, Puyol, Piqué, Capdevila; Busquets, Xabi Alonso, Iniesta; Cazorla, David Villa y David Silva.
Los internacionales españoles se concentraron ayer en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas y por la tarde se ejercitaron. La mayoría de las cámaras siguieron los movimientos de los cinco nuevos en esta ocasión: Cazorla, Bruno, Pablo Hernández, Aduriz y Borja Valero. Los tres primeros ya han debutado con la absoluta mientras que los otros dos están vírgenes.
El delantero del Valencia Aduriz se encontró algo abrumado por el acoso de las cámaras, un detalle que no le importó: «Con la dificultad que supone incorporarse a una selección campeona del mundo, evidentemente, es difícil entrar en el grupo. Estoy contento y agradecido a todos los que me han ayudado para conseguirlo. El nivel está altísimo y sé que es muy complicado quedarse».






