La Comisión Europea ha vuelto a echar un jarro de agua fría sobre la economía española. Según sus Previsiones de Primavera el Producto Interior Bruto (PIB) español crecerá este año tan sólo 8 décimas, 5 menos de lo previsto por el Gobierno español, mientras que en la Eurozona aumentará un 1,6%.
En materia de empleo pasa otro tanto ya que la tesis del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero de que la tasa de paro se mantendrá por debajo de la barrera psicológica del 20%, concretamente el 19,8% este año, tampoco se cumplirá a ojos de Bruselas ya que el paro llegará al 20,6% este año y bajará sólo cuatro décimas en 2012. La previsión para la Eurozona es una tasa de desempleo del 10%, menos de la mitad de la española. Bruselas considera que hasta final de año no se empezarán a notar los primeros signos de creación de empleo como consecuencia de la paulatina mejora que va a tener la exportación.
La previsión de déficit de Bruselas se sitúa en el 6,3% del PIB
Positiva la reforma del mercado laboral
En materia de valoraciones, más allá de los fríos datos, el Ejecutivo comunitario considera positiva la reciente reforma del mercado laboral, que ha dado más flexibilidad a las empresas, aunque recuerda que la creación de empleo estable es el principal reto que tiene por delante la economía española, al tiempo que advierte que la elevada tasa de paro de larga duración se puede convertir en estructural en el caso de nuestro país.
En cuando a los deberes por hacer Bruselas señala la reestructuración del sector bancario ya que está contribuyendo a rebajar la prima de riesgo de la deuda española, al contrario de los que sucede con otros países europeos. La Comisión también reconoce el esfuerzo realizado por el Gobierno en materia de consolidación fiscal, lo que ha hecho posible pasar de un déficit público del 9,2% en 2010 a acabar este año en el 6,3%, sobre todo gracias al positivo efecto recaudatorio de la subida del IVA.
En todo caso Bruselas alerta de que al margen de que el Gobierno central haga los deberes en materia de consolidación fiscal son también las Comunidades Autónomas las que deben cumplir con los objetivos de recorte de gasto y consolidación fiscal. La deuda, por su parte, subirá del 60,1% del PIB de 2010 hasta el 68,1% en que acabará 2011, alrededor de un 20% por debajo de la media comunitaria.







