Uno de cada dos niños de Los Remedios no tiene plaza en su barrio
La mitad de las familias de Los Remedios con niños que en septiembre cursarán 1º de Infantil tendrá que llevarlos a colegios de otro barrio ante la falta de plazas, según un estudio realizado por
La mitad de las familias de Los Remedios con niños que en septiembre cursarán 1º de Infantil tendrá que llevarlos a colegios de otro barrio ante la falta de plazas, según un estudio realizado por Beatriz Galán, miembro de la Plataforma de padres de Infantil de Los Remedios.
Esta madre afectada ha presentado esta misma semana al propio delegado de Educación, Jaime Mougán, los resultados del informe realizado con los datos recabados en los colegios Padres Blancos y Santa Ana, los únicos que hay en un barrio que carece de centros públicos.
Estos dos colegios suman una oferta de 125 plazas, claramente insuficientes para las 244 solicitudes que han recibido y que obliga a la mitad de los niños aspirantes a tener que matricularse en centros de Triana o Tablada, ya que para la Administración educativa estas zonas forman parte del mismo distrito.
A esto hay que sumar las 160 solicitudes que recibió los Maristas para sus 75 plazas de 1º de Infantil, en régimen privado por la negativa de la Junta de Andalucía a concederle el concierto pese a que estaba solicitado. El delegado de Educación señaló en una entrevista concedida a ABC que el problema de Los Remedios se disolvería de forma natural porque buena parte de las familias que solicitan plaza en esta zona reside en los alrededores de Sevilla, como el Aljarafe, con lo que, según sus datos, la reescolarización ubicaría a estos niños cerca de sus domicilios familiares.
Sin embargo, el exhaustivo estudio realizado por Beatriz Galán demuestra que esto no es cierto y revela que el 75 % de los niños que han pedido plaza están domiciliados en Los Remedios y sólo un 2 % en otras zonas de Sevilla. De hecho, sólo respecto a las solicitudes entregadas en los Padres Blancos, el 87 % de los no admitidos tienen domicilio familiar en Los Remedios, mientras que atendiendo al domicilio laboral, el 67 por ciento de los padres de los solicitantes trabajan en Los Remedios, no en Cartuja (20%), ni en Triana (13%).
Es por todo ello por lo que los colegios del barrio se ven desbordados, además de porque en la zona no hay ningún colegio público, ni previsión de hacerlo, según la Administración educativa.
Tampoco la Delegación de Educación va a atender la oferta de los Padres Blancos para que se le concierten dos nuevas líneas y en lugar de ello ha optado por abrirla en el colegio Vara del Rey, que tampoco está en Los Remedios sino en Tablada y en los públicos de Triana San José de Calasanz y Juan Ramón Jiménez. A estos centros tendrán que ir los niños de las familias de Los Remedios, pues aunque los padres no tienen obligación de escolarizarlos en el nivel de Infantil, la Delegación de Educación sí debe ofrecerles una plaza en su zona.
No obstante, en esta situación, un buen número de familias ha optado por dejar a los pequeños sin escolarizar en el sistema público -en casa o en guarderías- ya que les resulta inviable llevar a los pequeños a los centros alternativos propuestos por la Junta.
Los padres demandan un aumento de ratio con monitores de apoyo, a lo que Jaime Mougán, se ha negado hasta ahora, y que se incrementen los medios para intensificar la investigación sobre solicitudes de plaza presuntamente fraudulentas.
Los padres disponen de un mes -desde el 7 de mayo al 6 de junio- para presentar los recursos de alzada en los casos en los que haya fundadas sospechas de fraude. En este apartado, la plataforma de Infantil de Los Remedios reclamó al Delegado provincial de Educación que para perseguir el fraude cruce datos con la Seguridad Social, con el Registro y con el listado histórico del Padrón. Beatriz Galán agregó que si para demostrar que lo son, a las familias monoparentales sólo se les pide sentencia firme de divorcio, se permite la convivencia de hecho y se le da prioridad frente a los que realmente tienen una situación de monoparentalidad o familia numerosa.
Los padres piden también que se prime a los que viven y trabajan en el barrio «ya que no tenemos otra opción para elegir» y que se subdividan las zonas en subzonas para que tengan más puntos aquellos alumnos que estén más cerca del colegio demandado.
Entre los grandes perjudicados por el actual sistema de baremación están los hijos únicos, ya que en su solicitud no pueden puntuar por hermanos ni por familia numerosa. En el informe elaborado por Beatriz Galán se aprecia claramente este hecho. Tomando el caso de los Padres Blancos como ejemplo, no hay ninguna familia sin puntos adicionales -es decir, sólo con puntos de zona- que haya conseguido una plaza. Tampoco los hijos de trabajadores del colegio, ni aquellos que uno de sus tutores tengan reconocida una discapacidad. Así, sólo lograrán matricularse los que sean hermanos de alumnos del centro, presenten alguna discapacidad, demuestren tener necesidades especiales y la mitad de los que acreditan puntos por monoparentalidad o familia numerosa.
Los afectados consideran sobrebaremado el criterio de renta y piden que se de más consideración a las familias numerosas que a las monoparentales. De forma urgente reclaman a la Administración más plazas en los colegios de la zona y la construcción urgente de otros nuevos.
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