Noche de pánico en Utrera al anegar una tromba de agua más de un millar de casas
El alcalde de Utrera, Francisco Jiménez (PA), ha cifrado en 30 millones de euros los daños sufridos en la localidad como consecuencia del desbordamiento del arroyo Calzas Anchas, debido a las fuertes
Durante la madrugada, el agua formaba auténticos ríos en la Plaza del Altozano, en pleno centro de Utrera
El arroyo de Calzas Anchas volvió, cuarenta y tres años después, a desbordarse a su paso por Utrera, causando enormes pérdidas materiales. El fantasma de la tragedia rondó la ciudad la noche del martes al miércoles, cuando a partir de las 23 horas caía una fuerte tromba de agua que hizo rebosar el curso del arroyo, justo en el comienzo de su entubado por el caco urbano, a la altura del puente de la carretera A-394, conocido popularmente como «puente de los cochinos». En total, cayeron 160 litros por metro cuadrado.
El arroyo Calza Anchas, que parecía un amenazante mar sobre la carretera, tomó su cauce natural y comenzó a atravesar a partir de las doce y media de la noche el colegio Salesiano, inundándolo a su paso, para continuar por la calle Molares, Curro Guillén, San Juan Bosco, Las Mujeres, Plaza del Altozano, Plaza de la Constitución, Álvarez Quintero, Plaza de Santa Ana y Fernanda y Bernarda, entre otras, y buscar la salida por la Avenida de Los Palacios, donde el agua alcanzó más de un metro de altura, hasta enlazar con su cauce. Inundó todo en su recorrido.
Ante la avalancha de agua que corría desbocada pueblo abajo, la barriada de Coca de la Piñera, ubicada en una de la zonas más bajas de la localidad, y que está sufriendo desde hace muchos años el mal de las inundaciones, se llevó la peor parte, al quedar muchas viviendas totalmente cubiertas de agua, destrozando muebles, ropas y otros enseres. Algunos lo perdieron todo en la riada, según manifestaron a este periódico los residente, que se quejaban de su abandono: «Si en Andalucía actualmente se encuentra en alerta naranja, en nuestro barrio, cada vez que caen unas gotas, estamos en alerta roja».
Al medio centenar de personas evacuadas de la barriada Coca de la Piñera se las trasladó en un camión al colegio público de La Fontanilla, donde se les suministró colchones y mantas, regresando la mayor parte de éstas a su hogares cuando se normalizó la situación. Dos personas permanecieron alojadas en un hotel de la localidad al no poder regresar a sus domicilios. Ya la misma tarde habían sido rescatadas otras nueve personas en las urbanizaciones de El Comodoro, seis en Casablanca, siete en carretera de Los Palacios y tres en Bencarrón, según indicaron fuentes municipales.
Las mismas fuentes destacaron que «los daños son incalculables, aunque afortunadamente no hay que lamentar víctimas». En la barriada Coca de la Piñera se anegaron más de 400 viviendas, una veintena en Los Remedios, más de un centenar en La Fontanilla y La Gordilla. A estas hay que sumar las viviendas y establecimientos comerciales que inundó el agua del Calzas Anchas en su recorrido por la localidad. «La evaluación de los daños se comenzará a realizar a partir de hoy, aunque no se tendrá una estimación real hasta pasados unos días».
A los perjuicios reseñados, según el Ayuntamiento, habrá que sumar los centenares de vehículos afectados, muchos de los cuales permanecen en los garajes, en los que en algunos casos el agua llega hasta el techo. Daños importantes ha sufrido también el colegio Salesiano, especialmente en las instalaciones situadas en la parte baja, que quedaron inundadas. En el caso de la pedanías, la más afectada fue la de Pinzón, con más de la mitad de la población anegada. También hubo algunas viviendas inundadas en Guadalema de los Quintero y en la ELA del Palmar de Troya, en esta última además hubo importantes rachas de viento.
Tras el desbordamiento del arroyo, se trasladaron hasta la localidad efectivos del 112, agentes del Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA), de la Unidad Militar de Emergencias (UME), así como Guardia Civil de localidades próximas y bomberos procedentes del Parque Central de la Diputación Provincial y de las localidades de Los Palacios, Montellano y Marchena. Se montó un puesto de mando en la antigua carretera de Molares, próxima a la barriada Coca de la Piñera. Por parte del Ayuntamiento intervinieron más de un centenar de efectivos de Obras, Parques y Jardines, Bomberos, Policía Local y Protección Civil, a los que hay que sumar Guardia Civil, Huesna y trabajadores de la empresa de limpieza FCC.
Ante la gravedad de la situación, el alcalde de Utrera, Francisco Jiménez, reclamó antes del desbordamiento la ayuda de las delegaciones del Gobierno central y de la Junta de Andalucía. Hasta la localidad se trasladaron el Subdelegado del Gobierno Central, Faustino Valdés, y el Delegado del Gobierno de la Junta, Demetrio Pérez, para comprobar el alcance de las inundaciones sobre el terreno. Ayer por la mañana, visitó Utrera el director provincial de Protección Civil, y por la tarde, estuvieron en el enclave los populares Javier Arenas, Ricardo Tarno, Juan Bueno y Juan Ignacio Zoido.
El alcalde recorrió también la zona afectadas y por la tarde se reunió con los vecinos de la barriada Coca de la Piñera, en el colegio público de este nombre, donde se les suministró colchonetas y mantas, mientras que para la comida se les distribuyeron unos tickets que podrán emplear en un establecimiento local. Como dormitorio y estancia se habilitó el colegio público Coca de la Piñera, que ha suprimido las clases durante toda la semana.
El regidor ha solicitado la declaración del municipio como Zona Catastrófica. Para atender a los afectados, se habilitó ayer una oficina en el Área de Juventud en la que se les informará de los trámites que deberán seguir para solicitar las ayudas que les puedan corresponder. Jiménez confió en que «la ayuda de las distintas administraciones sea lo más rápida posible para atender a los afectados, pero sobre todo, que se acometan las obras de infraestructuras necesarias para que esto no vuelva a ocurrir».
La jornada de ayer se cerró al menos con una buena noticia: un utrerano es uno de los tres acertantes de segunda categoría (5+complementario) en el sorteo de la Bonoloto de anoche. Percibirá la cantidad de 66.296,96 euros,
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