«Hay que garantizar la confianza en nuestro sector financiero, una confianza que hemos tenido y que tenemos que preservar». Así se ha presentado la ministra de Economía, Elena Salgado, durante su comparecencia de esta tarde junto al secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa. La ministra ha asegurado que el objetivo del Gobierno es reforzar la solvencia y transparencia del sector y que la operación de rescate de entidades con problemas no ascenderá a más de 20.000 millones, en cualquier caso un 2% del PIB. Las condiciones del plan de rescate se darán cuando se haga público el decreto ley, algo que no pasará «hasta febrero».
«Queremos transmitir a los agentes internacionales la plena confianza que tenemos en nuestro sector financiero», ha asegurado Salgado, para quien «la solvencia de nuestro sistema es notable», pese a lo cual es necesaria una reforma de las cajas de ahorros.
Las medidas anunciadas son estas:
- Redefinición inmediata del ratio mínimo de «core capital» en relación a los activos de riesgo. Salgado ha asegurado que se adelanta el plazo para cumplir Basilea III con un ratio exigido del 8% y que podrá ser «superior para las entidades que no cotizan, sin presencia notoria de inversores privados y que presentan una dependencia de los mercados de financiación mayoristas superior al 20% de sus activos». Este nivel, por determinar, se hará «en las próximas semanas».
Salgado ha asegurado que «todas las entidades estarán en condición de superar los tests de estrés, pero si alguna entidad necesitara capital adicional, éste debería ser también cubierto». Por tanto, ha asegurado, el Gobierno «pedirá al Banco de España que determine cuáles son las necesidades de capital adicionales».
- Para las que no consigan el nivel de capital propio adecuado, el FROB podrá entrar en ellas de forma temporal, «y sólo adquirirá acciones de un banco, por lo que las entidades que participen deberán transferir el 100% de sus activos a una entidad bancaria». O sea, que el FROB no entrará en cajas de ahorros si no se convierten primero en bancos. Para garantizar un precio de mercado se contratará a consultores independientes. La inversión del FROB «no será nunca superior a cinco años». Las cajas que en otoño no tengan el ratio de solvencia adecuado verán como el FROB entra en su capital con derechos políticos.
Por su parte, Salgado ha asegurado que en ningún caso harán falta aportar por parte de dinero público «más de 20.000 millones».







