El Gobierno municipal sólo ha entregado un 17% de las VPO prometidas para 2007
A pesar de que la construcción de vivienda protegida ha sido señalado durante los dos últimos mandatos como uno de los objetivos prioritarios para el Gobierno municipal, las cifras oficiales
A pesar de que la construcción de vivienda protegida ha sido señalado durante los dos últimos mandatos como uno de los objetivos prioritarios para el Gobierno municipal, las cifras oficiales demuestran un escaso grado de cumplimiento de los compromisos adquiridos en los dos últimos planes cuatrienales de vivienda. El Ayuntamiento de Sevilla sólo ha podido entregar 2.670 llaves (61 correspondientes a promociones ejecutadas por la iniciativa privada) de las casi 15.000 viviendas prometidas para 2007, con el agravante de que en su totalidad corresponden a expedientes del Plan previsto para los años 1999-2002, cuando tomó posesión el primer gobierno presidido por Sánchez Monteseirín.
Las previsiones además no son muy halagüeñas, ya que la Empresa Municipal de la Vivienda, Emvisesa, augura un descenso en la actividad constructiva para 2008, año para el que no existe por el momento nuevo Plan cuatrienal de Vivienda conveniado con la Junta de Andalucía, sino tan sólo un protocolo de intenciones que no especifica objetivos, suelos, ni financiación.
El Plan de Vivienda suscrito por el Ayuntamiento con la Consejería de Obras Públicas en 1999, y el correspondiente al cuatrienio 2003-2007, sumaban 14.915 viviendas, cuya construcción recaía principalmente en Emvisesa (6.626) y en promotores privados beneficiarios de la oferta pública de suelo (6.622); el resto, 1.667 viviendas, eran responsabilidad de la Empresa Pública del Suelo de Andalucía EPSA. A enero de 2008, y según los datos aportados ayer por la portavoz adjunta del Grupo municipal del PP; Alicia Martínez, Emvisesa sólo ha entregado las llaves de 2.609 viviendas, todas correspondientes al Plan 1999-2002, de las que más de la mitad fueron de promociones iniciadas por el anterior gobierno. De promociones privadas sólo se han entregado 61 llaves (al menos de promociones sujetas a sorteo), mientras que Epsa no ha entregado ninguna de las viviendas que le corresponden, aunque ha adjudicado recientemente 110 pisos en La Corza y Polígono Aeropuerto que están actualmente en ejecución.
Por el momento, el Ayuntamiento no ha entregado las llaves de las promociones sorteadas en abril y noviembre de 2006 y mayo de 2007, inmediatamente antes de las últimas elecciones municipales.
Junto a este retraso, Alicia Martínez, denunció ayer la falta de transparencia de la Gerencia de Urbanismo a la hora de informar sobre su gestión en materia de vivienda. Frente a la acostumbrada «propaganda oficial» de las grandes cifras que pretende dar la impresión de estar ejecutando un importante número de viviendas públicas, el Gobierno municipal no ha hecho público los datos de la auditoría encomendada en 2006 al Instituto de Desarrollo Regional, que el delegado de Urbanismo, Emilio Carrillo, señalaba como aval independiente de la gestión en materia de vivienda. El contrato por Emvisesa con ese organismo habría finalizado sin que al menos la oposición conozca el último informe ni se haya dado cuenta del mismo en la comisión ejecutiva de Emvisesa.
El retraso en la ejecución de las promociones y la entrega de llaves no es el único incumplimiento en materia de vivienda pública del Ayuntamiento de Sevilla. El PP recordaba ayer algunas promesas electorales sobre las dotaciones de las futuras promociones de Emvisesa que incluían aire acondicionado y piscina comunitaria. Según Alicia Martínez, la calidad final de las viviendas «es la misma que la que se hacía hace 20 años» con aparatos de aire en las fachadas y ascensores que se caen en los huecos, dijo en relación a las denuncias de las comunidades de propietarios de promociones de alquiler de Emvisesa en Ramón Carande.
En mal estado
Otro de los déficits en la gestión de vivienda protegida se refiere a la rehabilitación del parque de vivienda municipal, sobre todo las viviendas antiguas en régimen de alquiler, problema que afecta a barriadas enteras. Para Alicia Martínez, las medidas de ingeniería económica aplicadas a Emvisesa para financiar la ampliación de Fibes bien se podrían haber realizado para afrontar la reurbanización del parque de viviendas de barriadas completas, como la de Los Pajaritos, en la que el Ayuntamiento se limita a cobrar el alquiler.
Los retrasos en la gestión de vivienda pública tienen igualmente repercusión en las unidades prometidas para vivienda social. Según las expectativas municipales, Otainsa debería contar con un parque de 1.500 viviendas sociales para las capas más desfavorecidas y para responder a situaciones de emergencia en materia de vivienda. Hoy sólo gestiona 38.
Tampoco se salvan del incumplimiento las promesas sobre vivienda de alquiler, basta constatar que ni siquiera se ha puesto la primera piedra de la promoción que en 2003 la Junta de Andalucía anunció en San Bernardo como paradigma de la política de viviendas de alquiler para jóvenes y tercera edad.
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