Denuncian al Hospital Virgen del Rocío por la muerte de un joven tras un atropello
Un vecino de Sevilla, Juan A. F. , ha puesto en conocimiento de los
juzgados las condiciones en las que se produjo la muerte de su
cuñado, Francisco Javier O. P, de 32 años, el pasado 12 de agosto en
el hospital Virgen del Rocío de Sevilla, días después de sufrir un
atropello, al considerar que la causa de la muerte fue "una lesión en
la cabeza, de la que el joven no fue operado en el hospital".
El denunciante explicó que "en el parte de defunción de F. J. O. P. se señalaba la lesión de la cabeza como causa de la muerte", y recordó que, según comunicaron a él y a su esposa -hermana del fallecido- los médicos que atendieron al accidentado, F. J. O. P tenía un coágulo de sangre en la cabeza a consecuencia del accidente sin que se interviniera el mismo quirúrgicamente pues "la evolución tras las primeras 48 horas había sido favoreble y además padecía rotura de tibia y peroné, de lo que había que operarlo pronto".
El denunciante ha puesto en conocimiento del juzgado de guardia
estos hechos, dentro del procedimiento de diligencias previas que se
abre tras una defunción, sin que, de momento los familiares hayan
decidido si van a iniciar un proceso legal para depurar
responsabilidades por lo sucedido, aspecto que se concretará la
próxima semana, según avanzó a Europa Press el abogado que se ha
hecho cargo del caso.
Juan A. F. puso también en conocimiento del juzgado de guardia,
que posteriormente dio traslado de las diligencias al juzgado de
instrucción número ocho de Sevilla, las "contradicciones" entre los
partes de admisión y de defunción.
Así, explicó que, mientras en el parte de defunción se señala la
citada lesión en la cabeza como causa de la muerte, en el parte de
ingreso que se envía desde el hospital al juzgado "se omiten" estas
heridas así como cualquier tipo de diagnóstico, pudiéndose leer
sólamente "atropellado por coche".
En este sentido, recordó que el citado parte de admisión, "que no
se envió al juzgado hasta el mismo día de la muerte", había sido
modificado dos veces. La primera de ellas, porque, ante el desacuerdo
de la familia al conocer que en el citado documento no se reflejaba
la herida de la cabeza y sólo la de la pierna, el médico que firmaba
el parte "reconoció el error y lo mandó subsanar", para que se
incluyeran las lesiones detectadas en la cabeza.
La "sorpresa" de Juan A. F. llegó cuando, al tener acceso al parte
que se envió pudo ver que "había desaparecido todo tipo de
diagnóstico y sólo podía leerse atropellado por coche".
Igualmente denuncia los hechos que se relacionan con la actuación
del hospital y de las autoridades competentes en relación al
accidente sufrido por el fallecido el pasado día 31 de julio en la
avenida de La Palmera de Sevilla, que no consta en ninguna de las
dependencias de la policía Local, Nacional y sólo existe un "parte
facultativo" del 061, "que recogió aquel día a F. J. O. P y lo trasladó
al Virgen del Rocío".
Según Juan A. F. no fue hasta el día 5 de agosto cuando el
hospital se puso en contacto con ellos -él y su esposa- para
informar del estado de la víctima, que entonces se encontraba en la
Unidad de Cuidados Intensivos de la Unidad de Traumatología.
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