Entrevistas
Guía de la Feria:
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Un año más: no sea torpe y no quede en la portada
ABC
Consejos
para los sevillanos
Aunque usted es un feriante consumado con un extenso historial a sus espaldas,
no está de más que repase estos consejos para evitar disgustos
esta semana.
1. No quedar en la portada. ...Salvo que queramos darle
boleto al interfecto. Ya sabe que si le citan en la portada, lo del soldado
Ryan será un juego de niños comparado con lo que le espera.
Si a pesar de todo queda en la portada, llévese un paraguas fosforescente.
2. Sea previsor. Póngase un clavel en la solapa,
aunque le parezca hortera: le librará del acoso de los vendedores
ambulantes. Y si fuma, compre tabaco en el estanco de casa, luego le costará
a precio de oro. En caso de apuro, gorronee.
3. Bendito móvil. Qué gran invento el identificador
de llamadas, librador de pelmazos («¡¿Que me llamaste?!
¡Qué dices!»). Compruebe la batería antes de
salir de casa. Y recuerde: en la Feria sólo vale la primera cita,
después todos perdidos.
4. Tussam power. Si no puede ir andando al Real, oblíguese
a ir en autobús, aunque no lo haga el resto del año. Le
permitirá beber con tranquilidad y evitar el suplicio de los aparcamientos
así como buscar un taxi a las cinco de la madrugada, algo que se
convierte en «misión imposible»
5. Bailar comedidamente. Ya sabemos que se ha pasado
medio año dándole a los pies en la academia, pero no sea
plasta y no atropelle para hacerse notar. En las casetas se baila casi
«agarrao», la cosa es no perder el compás.
6. Creer que el Real es tuyo... por ir a caballo. Eso
es lo peor, los que se montan en un equino y se creen John Wayne pero
con sombrero de ala ancha. Pelín de cuidado con los viandantes,
que un pisotón de un caballo duele una «jartá».
Y ojo: los caballos no se montan en las aceras.
7. Dejar las alpargatas y los botos en el armario. Que no estamos
en el Rocío, un pelín de gusto, y póngase zapatos para ir
a la Feria. Los botos y las alpargatas para las arenas, no para el albero.
Consejos para los turistas
1. No se disfrace. Esto es importante.
No ponerse como un fantoche, sino lo más sencillo/a posible. Caso
de disfrazarse, no hay que mosquearse con las risas del personal... repleto
de manzanilla.
2. Comer y beber. Esto es muy importante: no beba sin
comer. Los «guiris» cogen en feria las «trancas»
más serias porque la manzanilla les entra mejor que el agua. Y
allá van: sonora resaca cabezona. Beba y coma, pero esto último
sin parar.
3. Baile sin complejos. Aunque sea extranjero no crea
que aquí en la cuna del Real todo el mundo baila bien. No, algunos
son verdaderos patos. Así que baile sin complejos, además,
con el «puntito» nadie se fijará en su «depurado»
estilo.
3. Cuidadín con las palmas. Las sevillanas son
un baile de compás. Si viene de fuera y no sabe tocar las palmas,
por favor, haga otras cosa, que no hay nada peor que una palma fuera de
ritmo. Aunque en Feria siempre habrá algún voluntario que
le enseñe, seguro.
4. Sí, si, eso es un baño. Cada año
que pasa los baños en la Feria son más sofisticados, hay
casetas hasta con ducha. Pero en la mayoría son algo peculiares,
así que no se azore y entre sin más. La necesidad aprieta.
5. El plano. Elemento imprescindible para forasteros
y lugarenses. Sin plano, es un follón. Y, por cierto, no pregunte,
nadie se acuerda del nombre de las calles.
6. No, no se puede montar sin vestir a la usanza. Son
las normas, y aunque usted en su tierra monte a pelo y sin botos, aquí
no se puede. No insista, a menos que no quiera ser multado por la policía
municipal.
7. Aquí no se paga. Si le da por entrar en una
caseta y de repente ha caído en una familiar, acuérdese,
en algunas no se puede pagar. Sólo para abonados, sea listo.
8. Conténgase y no pida un whisky. Aunque no le
guste la manzanilla, el fino ni el «rebujito», no ponga en
evidencia a su anfitrión en su propia caseta. El JB queda para
la discoteca.
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