Entrevistas

• Inicio
• Alfredo Sánchez Monteseirín
• Gonzalo Crespo
• Rafael Álvarez Colunga
• Matilde Coral
• Victorio y Lucchino
• Pascual González y los Cantores de Híspalis
• Manuel Rodríguez
• Enrique Álvarez Riestra
• Eduardo Dávila Miura
• Juan Robles
• Isidoro Moreno
• María Teresa Campos
• Santiago Herrero
• Manuel Otero
• Mariko Nomura
• Cayetana Fitz-James Stuart

Guía de la Feria:

• La Portada
• Semana de figuras y de llenos en los tendidos
• Consejos
• Plano del recinto ferial
• Cómo llegar al real y no perderse
• De los Windsor al conde Lecquio

GONZALO CRESPO / DELEGADO DE FIESTAS MAYORES

“Nada más acabar la Feria, se empieza a montar la del año siguiente”

MARÍA JOSÉ CARMONA

Preparar el real de la Feria para que miles de personas disfruten una semana requiere del Ayuntamiento no sólo un gran esfuerzo económico sino meses de trabajo. Poner a punto la ciudad efímera que en definitiva es la Feria significa no dejar nada a la improvisación. Por eso el delegado de Fiestas Mayores, Gonzalo Crespo, afirma que no es ninguna exageración decir que la Feria se empieza a montar al día siguiente de que se acaba. No en vano, él mismo pudo comprobar como nada más tomar posesión, el mes de junio del año pasado, ya se ponían en marcha los expedientes que permitirían disponer de las partidas económicas para montar la Feria que ahora empieza. Hay trámites, que para que no se eche el tiempo encima se inician con un año de antelación.

No obstante, los primeros trabajos en el real empiezan a mediados de otoño, se incrementan en intensidad a primeros de diciembre, con la instalación simbólica del primer tubo de la portada, y terminan con la prueba del alumbrado, aunque, como reconoce Gonzalo Crespo, las ganas de Feria entran cada año antes y prácticamente desde que acaba la Semana Santa, los dispositivos especiales para la Feria tienen que estar preparados. Lo más complicado de la puesta a punto del real es, en su opinión, «la cantidad de puntadas y de cosas que hay que hacer» y no sólo para que las estructuras estén preparadas sino para que se cumpla toda la normativa propia de la Feria, incluída la de la adjudicación de las casetas o la matriculación de los enganches.

No menos horas requiere solucionar las deficiencias detectadas en Ferias anteriores. En la que está a punto de comenzar se incrementarán las medidas de seguridad. Por ello, este año las casetas de distrito van a cerrar este año una hora antes de lo habitual, concretamente a las tres y media de la mañana. A esa misma hora se apagarán las luces de la Feria con el fin de adelantar los horarios de reparto y de limpieza.

Adelantando esos horarios y con ayuda de los responsables del Real Club de Enganches, se pretende adelantar el horario del paseo de caballos que como cada año empieza y acaba más tarde impide que los paseantes disfruten de unas calles del real despejadas hasta bien entrada la noche.

Gonzalo Crespo asegura que todo el esfuerzo que requiere el montaje de la Feria sería inútil si no existiera coordinación entre todos los servicios de los que ésta depende. Esa coordinación también exige horas de trabajo y de reuniones que desde hace ya tres años son responsabilidad del Centro de coordinación operativa, Cecop.
Gracias al grado de acuerdo que se alcanza en esas reuniones, donde según el delegado, el talante de todos los presentes es extraordinario, los responsables de la Feria pueden estar más tranquilos y transmitir esa serenidad a los ciudadanos a los que Crespo recomienda que sobre todo se preocupen «de pasarlo bien y de disfrutar de la Feria que es lo que tienen que hacer porque no hay motivos para estar preocupados y porque todo está previsto por si hubiera que atender cualquier eventualidad». El delegado también reconoce que su equipo de Fiestas Mayores es de los más consolidados del Ayuntamiento, como lo demuestra que muchas de las personas que la forman lleven 25 años trajando en el montaje del real.

Precisamente por la cantidad de personas que intervienen en todos y cada uno de los preparativos de la Feria, resulta casi tan imposible como calcular cuántas la disfrutan, cuantificar cuantas trabajan en el real. Trabajar en la Feria será, fundamentalmente, lo que haga en estos días Gonzalo Crespo que ya piensa en las 300 casetas más que la Feria tendrá cuando se traslade al Charco de la Pava, que podrían terminar con «la dichosa imagen elitista que tiene.